Marta Belenguer: "Aunque he hecho cosas muy convencionales, siempre he tenido una vis muy alternativa"
Se considera una "cazatalentos". Muestra de ello es su participación en el corto '7:35 de la mañana', dirigido por Nacho Vigalondo cuando todavía era desconocido. Y gracias a esa pieza ambos se plantaron en la gala de los Óscar. Para entonces, ella llevaba una década actuando ante las cámaras, desde su debut en 'Farmacia de guardia' junto a Carlos Larrañaga a mediados de los noventa. Muchos considerarán que la suya es una trayectoria ligada a la pequeña pantalla ('Aquí no hay quien viva', 'Camera Café', 'Señoras del (h)AMPA', 'Todo lo otro'), aunque lo cierto es que sus raíces artísticas se encuentran en el teatro. Del escenario nunca se ha separado. Con menor frecuencia la vemos en el cine, al que califica de "ligue de una noche". No obstante, le ha cundido mucho: en Valencia, su tierra, raro es el director que no cuenta con Belenguer para sus películas. Así lo han hecho ya Álex Montoya, David Marqués o Javier Polo Gandía. Aun así, por si acaso falta el trabajo, a su faceta actoral suma la de hostelera con su bar madrileño Merinas.