“En mi trabajo también he aprendido a controlar al juez un poco tirano que es mi propia cabeza. Me sigue acompañando, pero hemos aprendido a convivir y trabajamos más a gusto ahora ese juez y yo. Esto me ha permitido disfrutar más de los personajes y ha influido en ello Pedro Almodóvar, con el que he tenido la suerte de trabajar en Julieta. Pedro tiene una forma de trabajar muy intensa que te exige mucho y al mismo tiempo te obliga a abandonarte en sus manos, pero con la tranquilidad que da saber que siempre te acompaña. No todos los directores pueden hacerlo, algunos te abandonan sin querer durante el proceso. Pero él no; él no te suelta porque el personaje es para él tan vital como para ti. Así sigo aprendiendo”.
“En el próximo rodaje que tengo para principios de 2016, del que aún no puedo contar mucho, espero seguir creciendo al lado de mis compañeros. Ojalá pueda seguir haciéndolo por mucho tiempo”.
Así se lo ha contado a BEATRIZ PORTINARI