‘Érase una vez…’, en Venecia
JAVIER OCAÑA
Dibujos animados en la España de 1950. ¡Y con premio! Ahí es nada el hito conseguido por Érase una vez…, largometraje con dirección artística de Alexandre Cirici y dirección de animación de José Escobar, que, a pesar de la escasez de medios técnicos adecuados, llegó a buen puerto después de tres años de trabajo. Con la técnica del rotoscopio (algo así como la precursora de la actual captura de movimientos), Cirici y Escobar realizaron una imaginativa y muy libre adaptación de La Cenicienta. Escobar –creador, entre otros personajes de tebeo, de Zipi y Zape y de Carpanta– se había unido a un grupo de profesionales en el que también se encontraba el prestigioso arquitecto Jaume de Ferrater como ejecutor de los decorados y trucajes. Los autores no pudieron titular La Cenicienta su película porque los derechos obraban en poder de Walt Disney, que estrenó su versión precisamente ese mismo año. Sin embargo, presentada la película en el Festival de Venecia, obtuvo la medalla de Oro de la categoría de animación.
