Buscando otro triunfo
El fenómeno Ocho apellidos vascos catapultó a la fama, en su debut en la pantalla, a Dani Rovira; a la consumada actriz que ya era Clara Lago (convertidos Rovira y Lago en la pareja en la vida real más perseguida por los paparazzi nacionales); y confirmó el talento cómico de Karra Elejalde y Carmen Machi. “Buscamos que la gente se siga descojonando de risa con los estereotipos”, comenta el alavés Elejalde, que consiguió como Machi y Rovira un Goya por su actuación en la primera entrega. “Lo que intentamos es que las personas se hermanen y pongan buena cara cuando aireamos las peculiaridades del País Vasco, Andalucía o, ahora, Cataluña”.
Si hay un director en España con un don especial para las comedias, ese es sin duda Emilio Martínez-Lázaro, que ya en 2002 se apuntó un gran éxito con otro clásico del género: El otro lado de la cama. Los 9,5 millones de espectadores que concitó en las salas Ocho apellidos vascos se tradujeron en una recaudación de 56 millones de euros, solo superados hasta la fecha por las norteamericanas Avatar y Titanic, aunque el filme español ostenta el récord absoluto de días (67) como número uno del box office.
Además, el estreno de la cinta en televisión (Telecinco y Cuatro) la semana pasada tuvo una audiencia de ocho millones de espectadores (la película más vista en la pequeña pantalla en los últimos 20 años), casi el 50% total de la audiencia en esa noche. “Estoy muy tranquilo esperando la respuesta del público para Ocho apellidos catalanes, porque sé positivamente que es imposible que se repita el impacto de la primera”, dice el cineasta madrileño.