Los estrenos del 28 de diciembre
‘Tiempo después’
FUTURO MANCHEGO
ALBERTO ÚBEDA-PORTUGUÉS
Aplaudida durante su presentación en los certámenes de San Sebastián y Abycine (Albacete), Tiempo después llega ahora a la cartelera y nos reencuentra con el personal mundo de José Luis Cuerda, uno de nuestros mejores cineastas. Se ha rodeado de un fantástico y amplio reparto que va a hacer las delicias del público en esta comedia futurista producida por Estela Films, Pólvora Films, Tiempo Después AIE, Atresmedia Cine...
Más o menos en el año 9177, el mundo y el universo entero se han reducido a un solo Edificio Representativo y a un entorno cochambroso donde malviven todos los parados e indigentes. Inasequible al desaliento, José María (Roberto Álamo), uno de los marginados, cree que las cosas quizá cambien si vende en el Edificio la estupenda limonada que hace. Que quizá viva un mundo diferente y más justo. ¿Por qué no?
Intérpretes y personajes
En un reparto muy coral, Roberto Álamo es quizá el que mayor protagonismo tiene. Le hemos visto recientemente en Alegría, tristeza (Ibon Cormenzana). “El guion de José Luis era una maravilla y, por supuesto, quería hacer ese José María inocente y valiente que encarno”, dice Álamo.
La madrileña Blanca Suárez es Méndez, la mano derecha del alcalde del Edificio, reacia a ser la concubina del rey, en la piel de Gabino Diego. A él le vimos en Nuestros amantes (Miguel Ángel Lamata). Por su parte, Suárez fue una de las protagonistas de El bar, de Álex de la Iglesia. Ese alcalde comprensivo pero con carácter al que nos referimos lo interpreta Manolo Solo, al que recordamos todavía en Tarde para la ira (Raúl Arévalo), por la que obtuvo el Goya.
“Me descubro ante Cuerda, su humor es tan subversivo como el de los Monty Python”, comenta Carlos Areces, quien da vida al escrupuloso conserje del Edificio. Areces ha destacado últimamente en La higuera de los bastardos (Ana Murugarren).
Imponentes y graciosos son los guardias civiles que hacen Miguel Rellán (en la serie Vergüenza), Daniel Pérez Prada (en el filme de Emilio Martínez-Lázaro Miamor perdido), así como el policía inseguro de Joaquín Reyes (en la serie Cuerpo de élite). “Esta película quiere entretener y hacernos reflexionar sobre lo que funciona mal en la sociedad”, explica Arturo Valls (Los del túnel, de Pepón Montero), coproductor de una cinta donde es un barbero sin clientes.
El bar de cañas y tapas del Edificio lo regenta Secun de la Rosa (de las producciones Arde Madrid y El Continental). “Que se haga una película como Tiempo después, tan a contracorriente, es un milagro. Hay que apoyarla todo lo que se pueda”, afirma el intérprete.
Mencionamos también la colaboración de Andreu Buenafuente (locutor de propaganda en el poblado de indigentes), que es además coproductor de la cinta. O la de Berto Romero (el barbero poeta): “Hay muchas clases de humor, y el de Cuerda es sublime”. A Saturnino García (pastor de ovejas descarriadas), le vimos con En las estrellas (Zoe Berriatúa), y Antonio de la Torre (un cura con pistola y escopeta de postas) está nominado a los Goya por partida doble: por El reino (Rodrigo Sorogoyen) y La noche de 12 años (Álvaro Brechner).
Las diferencias sociales
“Cuando comencé la escritura de esta historia me convencí de que, si daba un buen salto al futuro y me ponía imaginativo, podía situar el disparate en el año 9177, mil años arriba o mil años abajo. Cualquiera puede imaginarse cómo serán las cosas a esas alturas y si habrá o no gorriones y tortillas de patata. Yo elegí el Todo. El Todo es ubérrimo”, razona José Luis Cuerda. Su nombre se encuentra tras la mítica Amanece, que no es poco y también La lengua de las mariposas y Los girasoles ciegos, por las que logró sendos Goyas en la categoría de guion.
“En Tiempo después expongo mediante el humor las diferencias sociales que hay en esa sociedad futurista de la película. Y también en la sociedad actual, donde opera un libre mercado que realmente es el patio privado de unos privilegiados que acaparan capital y beneficios”, afirma Cuerda. Suyos son los títulos El bosque animado o Todo es silencio.
Los numerosos fans de Amanece, que no es poco irán en masa a ver Tiempo después. Tiene este nuevo filme el mismo humor, ese surrealismo manchego en el que se combina a Marx y el materialismo dialéctico con un rebaño de ovejas que pastan al borde de una piscina donde unas chicas en bikini están tomando el sol. Esa y otras muchas locuras nos regala Cuerda en esta cinta que se estrena el día de los Santos Inocentes. Es tiempo de risas y de tomarnos todos un poco el pelo. Así nos irá mejor.