Algunos de estos personajes ya estaban en la agradable Barcelona, noche de verano que De la Orden presentó con éxito en 2013. “El papel de Alberto San Juan es uno de los nuevos, siendo además el colmo del romanticismo. Una imagen fugaz, un rostro de mujer en la multitud, le sirve de gasolina para recorrer muchos hoteles de la ciudad preguntando por ella”, va explicando el realizador, suponemos que contento con el gran trabajo que hace San Juan (ganador del Goya al mejor actor por Bajo las estrellas, de Félix Viscarret), hablando con soltura, además de castellano, en catalán.
Sí que repiten roles Bárbara Santa-Cruz (este año estrenó Sexo fácil, películas tristes, de Alejo Flah) y Miki Esparbé (tiene en cartel La maniobra de Heimlich, de Manolo Vázquez), agobiados por los desacuerdos de convivencia pero confortados por una familia madrileña-barcelonesa que tratan de ayudar para que resuelvan sus diferencias. Esa familia numerosa esta compuesta por nada menos que Alexandra Jiménez, Tina Sainz, Mariano Venancio o Jordi Pérez, que también estuvo en Barcelona, noche de verano. “He tenido mucha suerte de contar con unos intérpretes maravillosos que han entendido muy bien el tono y la intención de la película”, comenta De la Orden.
Quizá la parte más dramática de Barcelona, noche de invierno (producida por El Terrat, la compañía de Andreu Buenafuente y José Corbacho) es la que protagonizan las veteranas y reconocidas Asunción Balaguer (en la serie de TVE Olmos y Robles) y Monserrat Carulla (participó en la producción de TV3 La Riera), en torno a unos parientes (Berto Romero, Clara Segura, Abel Folk) que, en este caso, torpedean que las amigas de toda una vida se “estimen”, como se dice en catalán. “El amor es amargo cuando no se aceptan socialmente los términos de una relación. Nos acostumbramos a que las personas sean de una forma y juzgamos intolerable que cambien su actitud”, reflexiona el director.