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26-05-2022

#LeerSientaDeCine


La ausencia de certezas, según Romina Paula


El público español descubre ‘Acá todavía’, valiente novela de la escritora, directora, dramaturga y actriz argentina, amadrinada por Julieta Venegas

ANTONIO ROJAS (@mapadeutopias)

La pequeña Editorial Barrett tuvo hace años la feliz y loca ocurrencia de pedir a sus escritores más admirados que recomendaran una obra que aún no se hubiese publicado en España. El proyecto, “Editor/a por un libro”, ha permitido desde entonces descubrir a algunos autores y ahora nos abre los ojos, por mediación de la cantante y compositora mexicana Julieta Venegas, a una brillante novelista argentina, Romina Paula (Buenos Aires, 1979), también directora de teatro y cine, dramaturga y actriz. Y nos la queríamos perder, con todo lo que tiene que ofrecernos.


Los lectores argentinos ya tuvieron ocasión de leer Acá todavía, la novela sugerida por Venegas, en 2016. A España llega con cierto retraso, pero bienvenida sea esa tardanza porque al final ha caído en nuestras manos esta joya. Una delicatessen cocinada por una mujer que intenta verlo todo como si fuera la primera vez, porque de ese modo combate la alienación.


La autora bonaerense da voz a una treintañera urbanita, Andrea, que ejerce de protagonista y narradora. Y desde la atalaya de la primera persona, mientras deja discurrir libremente un pensamiento que se expresa con lenguaje coloquial y porteño, reflexiona sobre la identidad sexual, el deseo, las relaciones de pareja, la familia, la amistad… Sin fingimientos, desde la más radical de las franquezas.


También, y sobre todo, desde la renuncia a las certezas, anteponiendo siempre la duda frente a una reacción visceral. Porque, como aseguraba Victoria Camps en Elogio de la duda, la actitud dubitativa no conduce a la parálisis de la acción, sino que es un ejercicio de reflexión, de ponderar pros y contras. Y eso es lo que hace Andrea, quien se pregunta sobre todo aquello que la rodea y sobre quienes tiene a su alrededor. No da nada por sentado. Se aleja por completo de los dañinos dogmatismos. Desconfía de aquellas personas que no flaquean, siempre seguras, inmutables en sus convicciones.


En la primera parte del libro, “Todavía”, mientras asiste en la habitación de un hospital a la enfermedad terminal de su padre, Andrea se cuestiona sobre sus preferencias sexuales, pasadas y presentes, estimulada por el vértigo y el vuelco en el estómago que experimenta ante una de las enfermeras que cuida de su progenitor. No le gusta eso de tener pareja, del género que sea. Se basa en lo poco atractiva que se pone la gente cuando dice enamorarse y, sobre todo, cuando renunciamos a nosotros mismos. La alienación del amor frente a la libertad de la amistad, donde todo es más prístino y cristalino. Como tampoco entiende que las rupturas supongan someterse al estúpido patrón de no volver a verse, al súbito nunca más.


Detrás de los miedos que afloran, de ese querer saber y sus incertidumbres, figura la búsqueda de la identidad; la necesidad -o no-, de definirse en cada momento, de saber exactamente quién es.


De cara a la segunda parte del libro ( “Acá”), una vez su padre ha muerto y repasa la angustia de los momentos pasados junto a él,  la joven Andrea persiste en cuestionar lo desconocido y lo imprevisible, en no consentir que las cosas transcurran solo porque sí. El fallecimiento del padre da paso al embarazo de la hija y a las dudas sobre la maternidad, sobre todo a la escasa seducción de ser madre aunque haya decidido serlo. De pronto, siente que se trata del pasado remoto de alguien y también de su porvenir.


Esas dudas y más dudas también se trasladan al universo de las palabras, y la gramática compartida. E impulsan la narración y la enriquecen. ¿Qué término es más apropiado en cada situación? ¿Refleja esta palabra lo que queremos expresar o quizá sea mejor emplear esta otra?


No olviden su nombre, Romina Paula, ni sus otras novelas: ¿Vos me querés a mí? y Agosto. Y para quienes quieran ir más allá de la lectura, recuerden que su primera película, De nuevo otra vez, que escribió, dirigió y protagonizó, obtuvo el Premio Horizontes del Festival de Cine de San Sebastián en 2019.

Romina Paula, fotografiada por Francisco Garamona

‘Acá todavía’ (Editorial Barrett, abril de 2022). 264 páginas, 18,90 euros





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