ALBERTO ÚBEDA-PORTUGUÉS

Ha sido aplaudida en el Festival de San Sebastián la segunda película de Pilar Palomero, el clave de potente drama adolescente, tras su absoluto triunfo con aquella ópera prima titulada Las niñas. Rodada en distintas localizaciones de la provincia de Zaragoza, La Maternal es una producción de Inicia Films y BTEAM Pictures, con las actuaciones de Ángela Cervantes y la debutante Carla Quílez, quien recibió Concha de Plata a la mejor interpretación protagonista en el certamen donostiarra. Ambas actrices están acompañadas además por un plantel de actrices y actores no profesionales.

   La rebelde Carla tiene 14 años y vive en un restaurante de carretera en las afueras de un pueblo con su joven madre soltera. La muchacha pasa las horas con su amigo Efraín. Cuando la trabajadora social se da cuenta de que está embarazada de cinco meses, Carla ingresa en el centro para madres menores La Maternal, donde pasa a compartir su vida con otras chicas jóvenes. Con sus bebés se abocan a un mundo de adultos para el que no les ha dado tiempo a prepararse.

   “Penélope, mi personaje, tiene una vida difícil. Intenta responsabilizarse de su problemática hija mientras sigue teniendo todas las necesidades e intereses de una persona todavía joven”, explica la barcelonesa Ángela Cervantes, destacada en los filmes Chavalas (Carol Rodríguez-Colás), Un novio para mi mujer (Laura Mañá) y Donde caben dos (Paco Caballero), así como en las ficciones televisivas La Riera, Vida perfecta y Com si fos ahir.

   “Recuerdo que Carla nos llamó la atención con unas fotos en Instagram y unos vídeos en los que la veíamos bailar. En el casting destacó enseguida y conectó fenomenal con Ángela”, afirma la directora sobre Quílez. esta se muestra emocionada por la “confianza que Pilar, Ángela y el resto del equipo depositaron en mí”. 

   En el reparto encontramos al zaragozano Pepe Lorente, que trabajó en películas como Resucitado (Kevin Reynolds), Ignacio de Loyola (de Paolo Dy y Cathy Avanza) o El reino (Rodrigo Sorogoyen) y en las series Amar es para siempre, Las chicas del cable o Todo lo otro. Otro personaje es el que interpreta la actriz Olga Hueso, en películas como Hazlo por mí (Ángel Fernández Santos) y Zamorana: todo por su hija (Martí Guarch) y las series Desconocidas y Sentimos las molestias. 

Adolescente y madre

“La Maternal trata sobre la complejidad de ser adolescente y madre al mismo tiempo. Quise plasmar un retrato luminoso y oscuro, alegre y doloroso, tierno y duro, en el que me gustaría transmitir la fuerza, la heroica resiliencia y la inagotable perseverancia de las madres adolescentes que hemos tenido en la película: María, Sheila, Estel, Jamila, Claudia... y todas las mujeres que han inspirado esta historia”, comenta Pilar Palomero, que con Las niñas conquistó los Goyas de mejor película, dirección novel, guion y fotografía. Obtuvo la Biznaga de Oro a la mejor película en el Festival de Málaga y fue la cinta con más entorchados en los Forqué y los Feroz. 

   El germen de La Maternal surgió “hace unos años, cuando tuve la posibilidad de conocer de cerca un centro de acogida para madres adolescentes. Una reunión con el director de aquel centro me llevó luego a mantener a emotivas charlas con mujeres que, ya desde su mirada adulta, me contaron cómo había sido para ellas vivir la maternidad de forma precoz”, relata la cineasta aragonesa, que acumula premiados cortos en su haber: Sonrisas, Niño balcón, Chan, La noche de todas las cosas, Zimsko Sunce... En su filmografía también figura el documental Letters from the Ends of the World y un episodio de la serie Venga Juan.

   Nos asombra en La Maternal el conmovedor trabajo de la debutante Carla Quílez, al lado de una formidable actriz, Ángela Cervantes, que poco a poco conquista el favor tanto de la crítica como del público. Pilar Palomero ha conseguido una excepcional mezcla de realidad y ficción, de intérpretes profesionales y amateurs que realmente han vivido y viven la experiencia de ser madre sin haber terminado aún de crecer y madurar. Sin darnos cuenta, los espectadores formamos parte de ese grupo en el que las risas de las mamás precoces se confunden con el llanto de esos bebés a los que ni siquiera saben acunar.