BEATRIZ PORTINARI

FOTOS: ALFREDO ARIAS

"Nunca he tenido claro eso de los premios al mejor actor o la mejor actriz. ¿Mejor entre quiénes? Y eso que obtuve un Premio Nacional de Teatro, que por supuesto agradecí, pero las afirmaciones absolutas no me convencen. En cambio, recibir este premio a mi trayectoria de mano de mis compañeros, de la profesión, sí que me reconforta. Primero fue la sorpresa y después llegó el agradecimiento. Profundo. ¡Un premio a mi trayectoria! Eso incluye los aciertos y los errores. He sido un hombre de teatro y cine, un actor global, que lo mismo te hacía un Pirandello o un Lorca sobre el escenario que películas de spaghetti western en la gran pantalla. Ahora estoy trabajando en dos filmes: Estándar (con rodaje en Tudela) y Hombre muerto no sabe vivir (en Marbella). Sí me costó más entrar en televisión porque no tenía nada que ver con el cine o el teatro al que estaba acostumbrado. Pero enseguida me enganchó la pequeña pantalla porque es más inmediata: tu trabajo se ve más rápido, no pasan meses desde el rodaje hasta el estreno. He sido productor, director… aunque no me gusta tanto dirigir: implica tener demasiadas cosas en la cabeza, por eso admiro mucho a quienes se dedican a eso. Mis mejores trabajos son aquellos en los que fui bien dirigido. ¿Un consejo a los jóvenes actores? Que trabajen duro, sin descanso, que no desfallezcan. Detrás de todo está el trabajo y dormirte a las tres de la mañana con un texto encima”.