Ante ellos, el vicepresidente de AISGE, Fernando Marín, manifestó su pesar porque “muchos no saben quiénes somos, y a veces ni quieren saberlo”. Y para contrarrestar esta ignorancia injusta, invitó a todos los presentes a leer esta nueva colección de libros “hasta el final”, que cobijan entre sus páginas modelos de vidas comprometidas con la profesión, contadas con prodigalidad de detalles, lances y anécdotas de toda laya.
Y con la “complicidad” y la ayuda prestada en el Taller de la Memoria, apuntó Climent, para la ardua tarea de narrar y poner negro sobre blanco vidas y obras, con esas cinco nuevas autobiografías son ya 92 los libros de actores y actrices. Un legado que cada vez despierta mayor admiración en los estamentos culturales de nuestro país e incluso más allá de nuestras fronteras, destacó el coordinador del taller, Juan Jesús Valverde. Con diez años ya acumulados por esta iniciativa, las memorias están cumpliendo con creces el doble propósito de despertar ilusión y generar testimonios: “Creo que el acierto de AISGE con este taller colma las ilusiones de infinidad de colegas, de alguna forma injustamente marginados por edad. No nos olvidemos de ellos antes de tiempo, antes del último acto”, exhortó Valverde, quien recordó, parafraseando al actor francés Joubet, que los cómicos disfrutan del privilegio incomparable de “vivir mil muertes y morir mil vidas”.